Durante estos días, en actividad académica en Panamá pude constatar el extraordinario desarrollo económico y el pleno desarrollo democrático de este país latinoamericano, cuyo ejemplo deberíamos seguir, especialmente los venezolanos que contamos con tantos recursos materiales y humanos, pero con una pésima gerencia pública y un modelo equivocado de desarrollo.
En Panamá parece cerrado el ciclo del populismo militarista de la izquierda y la derecha. Su última expresión fue con el general Noriega. Aquí también quiso instalarse el partido único con el líder mesiánico y la revolución permanente, custodiada y defendida por los “batallones de la dignidad”. Finalmente se impuso frente a la demagogia, la racionalidad política y la alternabilidad democrática.
Hoy Panamá es una plena democracia, con pleno desarrollo. Es centro vital de la economía mundial en el área de bienes y servicios con una seria política de Estado y una efectiva apertura comercial. Vemos aquí la integración de la gestión pública con la privada.
La seguridad jurídica ha permitido atraer al capital extranjero, con información para los inversionistas, y asesorías gratuitas.
Panamá muestra el mayor crecimiento de América Latina y el Caribe con una tasa baja de desempleo e inflación, como Estado exportador sobrepasa la cifra de 10 mil millones de dólares, y una presencia de capitales extranjeros superior a los 5 mil millones de dólares. Esta economía crece a un ritmo de 6 a 7%, y seguirá con la expansión del Canal de Panamá y la presencia de los mega-navíos y las flotas mercantes que de todo el planeta afirmaron el papel del Istmo como Hub-Logístico.
Panamá reafirma el libre comercio. Es uno de los países de más alta puntuación por su libertad económica y por su tasa de competitividad global.
En su economía Panamá optó por la paridad de su moneda, el balboa, con el dólar. Como Ecuador el país está dolarizado.
Es el país que tiene mayor conectividad marítima de América Latina. Como la actividad marítima está llena de riesgos Panamá ha desarollado una variedad de cobertura de pólizas. Panamá lideriza el abanderamiento de naves.
El escándalo de los Panamá Papers ha obligado al gobierno a implementar una nueva Ley contra la legitimación de capitales y así evitar el lavado de dinero. Se busca convertir al país en el más alto centro bancario latinoamericano.
En el futuro no sólo para Panamá si no para el continente, la vía interoceánica continuará siendo fundamental para el comercio mundial, impulsando el complejo portuario de transbordo en el Atlántico y Pacífico. Inteligentemente por la importancia del transporte marítimo el Estado creó una Autoridad Marítima Única, como organismo autónomo para la administración, promoción, regulación, y ejecución de las estrategias y actividades relacionadas con el sector marítimo, en el compromiso de promover el desarrollo socioeconómico de la nación y el bienestar de la población.
Pero en Panamá, también nos ha llamado la atención el sistema de transporte de la capital, con el nuevo metro que une el área de San Isidro con el centro de la ciudad. Esto es parte de un plan maestro para mejorar la movilidad ciudadana que se extenderá a dos nuevas líneas y a un ferrocarril ligero. Recorrimos algunas de las estaciones y observamos la puntualidad y la limpieza, así como el trato respetuoso de las autoridades y los ciudadanos.
Llegar y salir de Panamá por el Aeropuerto Internacional de Tocumen, es constatar el esfuerzo del gobierno en conectar a Panamá con el mundo, con las mejores estructuras aeroportuarias posibles. ¡Qué diferencia con Maiquetía! Y con nuestros aeropuertos que por la posición estratégica de Venezuela deberían tener toda la atención del Gobierno Nacional y de los gobiernos locales. Para los panameños la aviación y los servicios relacionados con el turismo han sido fundamentales. Ojalá tuviéramos en Venezuela una autoridad aeronáutica civil como la panameña, responsable del espacio aéreo y todo lo concerniente a la aviación civil y comercial del país y con plena vocación de servicio público. Cómo añoramos la época de Viasa, cuando como Copa Airlines teníamos conexiones para toda la región y todos los continentes. Copa, hoy desde Tocumen une a toda América Latina, pero también a las Américas, Europa y el Medio Oriente incluyendo a Dubai y Turquía.
En otra oportunidad nos referiremos a las ventajas migratorias y fiscales de las Zonas Francas de Producción, que en un próximo gobierno de Venezuela, se debería implementar y que en Panamá, están exentos de pagos de impuestos en ganancia y tasas aduanales, en materiales de construcción, equipos importados, bienes y licencias comerciales. Visitamos la Zona Libre de Colón y vimos tantas realizaciones que podrían ser de alto beneficio para países como el nuestro.
Venezuela debería seguir el rumbo del Canal de Panamá en su democracia y en su desarrollo.
Escrito por Julio César Pineda
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