En la fila del banco hay hombres, mujeres y perros esperando su turno. Así como leyó. “Clientes” peludos y de cuatro patas acompañan a sus amos mientras solicitan algún servicio, rompiendo con su sola presencia o con sus ladridos el ambiente formal y austero que suele distinguir a una entidad financiera. La Prensa.
Desde la entrada del local, un letrero anuncia los servicios de wifi y café para los usuarios y da la bienvenida a quien llegue con su mascota perruna. Una alfombra, un recipiente con agua y juguetes de goma aguardan a los canes que visiten las instalaciones.
‘Luca Toni’ y ‘Dominic Paz’ parecen sentir la hospitalidad y rascan y menean su cola en total confianza. Quienes pasan cerca de los caninos les sonríen y hasta les dan unas palmadas en la cabeza. Otros los ven un instante, se detienen, observan de nuevo, confirman que se trata de un perro dentro de un banco, un escenario que seguro no habían presenciado antes.
Resulta que hace unos días Banco Panamá se convirtió en la primera empresa de su ramo en el país en permitir el paso a animales de compañía, específicamente perros.
Otros comercios han implementado medidas similares. Es el caso de las tiendas Novey, We Fresh Market, de comida orgánica; la boutique Bikini Shop, restaurantes como Don Vicente Coffee o Stizolli y el bar/centro cultural Onplog, que organiza las “Noches perrísticas”.
Se trata de la entrada de la tendencia dog friendly o pet friendly, un movimiento de inclusión de las mascotas con dueños responsables que se consolida en el extranjero, con grupos organizados en países como Estados Unidos, Inglaterra y Colombia o sitios web como dogfriendly.com, una guía para personas y mascotas viajeras, que detalla por país los hoteles, restaurantes, parques, playas y centros culturales que aceptan animales de compañía.
Hablan los clientes
Daniela Chan ha pasado de una sorpresa agradable a otra en pocas semanas al ver que cada vez más comercios en Panamá permiten el paso de perros. Ahora puede salir a caminar o a pasear con ‘Candy’ y hacer un alto para comprar algo o ir al banco sin tener que dejar a su mascota encerrada en el vehículo.
Similares testimonios se pueden encontrar en las redes sociales de las empresas que han apostado por adoptar medidas dog friendly en Panamá. “¡No lo puedo creeeer!”, “¡Re Like!”, “¡Iré con mi manada!” y “¡Woof woof! Puedo pasear en la carretilla y ayudar a mamá con las compras”, son algunas de las reacciones de la mayoría de los clientes. Otros solo comentaron que por la comodidad de todos los usuarios esperaban que los propietarios de las mascotas fueran responsables.
Apuestas y riesgos
Banco Panamá es una de las entidades comerciales más recientes en sumarse al movimiento dog friendly. Todo empezó con un “ Dog Day” el pasado 20 de junio. Dejaron pasar a quien viniera con su perro solo por ese día. Había nervios por conocer la reacción de los clientes, tanto de los simpatizantes por las mascotas como de los que no, reconoce Cristina Quintero, gerente de mercadeo de Banco Panamá. Estaban preparados para responder a diversos escenarios para no incomodar a nadie, pero no hizo falta. Solo un par de perros territoriales aprovecharon la visita para alzar la pata, “marcar” como suyo una frontera nunca antes pisada. Nada que no se resolviera con la inmediata intervención del equipo de limpieza, apunta Quintero.
“Todos los bancos ofrecen los mismos servicios, entonces para diferenciarse hay que pensar de otra forma. Por eso, decidimos apostar por ser dog friendly. Muchas personas tienen solo los sábados para hacer diligencias en el banco y si tienen perros, seguro les gustaría salir con ellos, entonces, ¿por qué no darles esa oportunidad?”, cuenta Quintero.
Llegaron al banco familias enteras con sus perros y hubo momentos en los que coincidieron unos seis canes dentro del local. Al final del día, la satisfacción y muestras de agradecimiento de los clientes fue tal que decidieron admitir perros en el banco todos los días.
Quintero explica que la medida es para perros porque es la mascota que se suele llevar de paseo, ya sea caminando o en el carro.
Más resultados
En We Fresh Market permitieron la entrada de mascotas porque muchos de sus clientes gustan hacer ejercicios en compañía de sus perros, y si quieren pasar a tomarse un refresco es una maldad decirles que dejen su can atado afuera, dice Patricia Gaitán, administradora del mercado de alimentos orgánicos. “Las personas se han sentido tan bien al ver que no se restringe el paso de sus mascotas, que han vuelto con más amigos y más perros”, acota Gaitán.
En el caso de los restaurantes, en mayo pasado se realizó por primera vez en Panamá el “Día Beneful”, una campaña que incluyó a 16 locales que por un día permitieron que sus visitantes pudieran ir con sus perros. El resultado fue “clientes felices, los gerentes de marketing y los propietarios de los restaurantes fueron muy receptivos con la moción, las expectativas se cumplieron”, afirma Johanna Palacios, de RUSH Marketing, ejecutores de la actividad.
Don Vicente Coffee fue uno de los restaurantes que formó parte de la campaña y el experimento le llamó tanto la atención que habilitaron un área permanente en la terraza del local para que siempre que alguien quiera venir con su perro pueda pasar, indica Alejandro Hernández, uno de los propietarios del lugar.
Es un modelo que ha dado tan buenos resultados, prosigue Hernández, que ya están evaluando tener un menú solo para mascotas.